En el contexto actual, las empresas están enfocadas en reducir su impacto ambiental, y la disminución de las emisiones de CO2 juega un papel crucial en este objetivo. Una de las áreas donde las empresas pueden hacer una diferencia significativa es en la elección del equipo que utilizan.
En este artículo, llevaremos a cabo una comparación entre las emisiones de CO2 de un montacargas contrabalanceado de litio de 2,5 toneladas con una batería de 10-20 kWh y las de un montacargas contrabalanceado diésel de 2,5 toneladas. Es esencial comprender qué son las emisiones de CO2, por qué son perjudiciales para el medio ambiente y por qué los equipos de iones de litio son la elección adecuada para un futuro más sostenible.
¿Qué son las emisiones de CO2 y por qué son relevantes en la industria de manejo de materiales?
Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) hacen referencia a la liberación de este gas a la atmósfera. El CO2 es un gas incoloro e inodoro compuesto por un átomo de carbono y dos átomos de oxígeno (CO2).
Las emisiones de CO2 pueden originarse por:
Procesos naturales: como la actividad volcánica, la descomposición y la respiración, así como la liberación de océanos, incendios forestales y procesos geológicos.
Actividades humanas: como la quema de combustibles fósiles, procesos industriales, manejo de desechos, deforestación y cambios en el uso de la tierra.
Si bien los procesos naturales contribuyen a las emisiones de CO2, forman parte de un ciclo de carbono equilibrado que ha existido durante millones de años. No obstante, las emisiones de CO2 resultantes de la quema de combustibles fósiles han aumentado significativamente desde la Revolución Industrial. Este tipo de emisiones son las más preocupantes, ya que el CO2 es un gas de efecto invernadero, lo que significa que tiene la capacidad de atrapar el calor del sol en la atmósfera terrestre. Este efecto invernadero es fundamental para mantener la temperatura de la Tierra y hacerla habitable.
Cuando se trata de la elección de equipos industriales, la comparación se centra a menudo entre montacargas con motor eléctrico o de combustión interna.
¿Qué es un montacargas contrabalanceado de combustión interna (IC)?
Un montacargas con motor IC es un tipo de montacargas que utiliza un motor de combustión interna para su funcionamiento. Puede ser alimentado con gasolina, diésel, propano o gas natural.
¿Qué es un montacargas contrabalanceado eléctrico?
Un montacargas contrabalanceado eléctrico es aquel que utiliza un motor eléctrico alimentado por una batería a bordo. La batería suministra energía al motor eléctrico, impulsando las ruedas y el sistema hidráulico que eleva y desciende la carga.
Existen diferentes tipos de baterías utilizadas en los montacargas eléctricos:
Plomo-ácido: Las baterías de plomo-ácido son el tipo más tradicional, aunque presentan ciertas limitaciones, como su peso, la necesidad de un mantenimiento regular y tiempos de carga más prolongados.
Iones de litio: Las baterías de iones de litio son un tipo más moderno que se está volviendo cada vez más popular. En comparación con las de plomo-ácido, son más ligeras, se cargan más rápido y no requieren mantenimiento.
¿Cuál es la diferencia en términos de emisiones de CO2 entre un montacarga diésel y un montacarga de litio?
Ahora analicemos más detalladamente las emisiones de CO2 de los montacargas diésel y de litio.
Montacargas contrabalanceado IC:
Los montacargas diésel son comúnmente utilizados en entornos industriales debido a su capacidad para levantar cargas pesadas. Sin embargo, los motores diésel generan una cantidad considerable de emisiones de CO2 tanto durante la producción del combustible diésel utilizado para alimentar el motor, como durante la combustión interna.
El proceso de transferencia de diésel al tanque para su uso se conoce como «pozo a tanque». Las emisiones derivadas de la producción de diésel se encuentran en el rango de 500-600 gramos de CO2 equivalente por litro. Un montacarga diésel de 2,5 toneladas consume aproximadamente entre 2 y 3 litros por hora, lo que genera entre 1000 y 1800 gramos de emisiones de CO2 del pozo al tanque por hora.
Al quemar el diésel, se emiten aproximadamente 2640 gramos de CO2 por litro, lo que resulta en entre 5280 y 7920 gramos de emisiones de CO2 por hora durante la combustión.
Por otro lado, los montacargas de litio, que utilizan baterías de iones de litio, representan una alternativa más limpia.
Montacargas de iones de litio:
Si bien la producción de una batería de iones de litio para un montacarga de 2,5 toneladas genera aproximadamente entre 300 y 600 kg de emisiones de CO2, esta es una emisión única y la batería tiene una vida útil prolongada.
Esto implica que, aunque la producción inicial de la batería tiene una huella de carbono más alta que la del montacarga diésel, durante su vida útil, el montacarga de litio genera menos emisiones.
Para comparar de manera justa, también debemos considerar las emisiones de CO2 provenientes del consumo de electricidad durante la operación del montacarga de litio. Hoy en día, la intensidad media europea de CO2 en el mix eléctrico es de aproximadamente 275 gramos por kWh. Suponiendo que un montacarga de litio de 2,5 toneladas consume 5 kWh por hora, las emisiones de CO2 resultantes son de 1375 gramos por hora.
Cuando comparamos las emisiones de CO2 en funcionamiento, queda claro que el montacarga de litio tiene emisiones significativamente más bajas que su contraparte diésel. Mientras que el montacarga diésel emite entre 5280 y 7920 gramos de CO2 por hora solo en combustión, el montacarga de litio produce solo 1375 gramos de emisiones de CO2 por hora, considerando tanto la producción de la batería como el consumo de electricidad.
Ventajas de los equipos de manejo de materiales de iones de litio:
Como hemos visto, elegir un montacarga de iones de litio supone una ventaja para el medio ambiente, ya que sus emisiones de CO2 son inferiores a las del montacarga diésel. Pero eso no es todo, los montacargas de litio ofrecen muchas otras ventajas frente a los diésel. A continuación, presentamos algunos puntos clave:
1. Seguridad mejorada
En comparación con los montacargas diésel, los montacargas de litio son más seguros, ya que eliminan el riesgo de fugas de combustible y los peligros asociados con el almacenamiento y manejo de combustibles inflamables. Además, las baterías de iones de litio de EP Equipment se producen con tecnología LFP, que presenta una menor posibilidad de inflamación y explosión en comparación con la tecnología NMC cuando se perfora o sobrecalienta.
2. Reducción de ruido
Los montacargas diésel pueden generar bastante ruido durante su funcionamiento, lo que puede resultar problemático en entornos interiores o áreas sensibles al ruido. En cambio, los montacargas de litio suelen ser más silenciosos y producir menos contaminación acústica. Esta ventaja puede conducir a un entorno de trabajo más cómodo y productivo.
3. Eficiencia operativa
Los montacargas de litio a menudo presentan una aceleración más rápida y un manejo más suave en comparación con los montacargas diésel. Proporcionan una entrega constante de energía a lo largo de su ciclo operativo, lo que resulta en una mayor eficiencia y productividad. Además, las baterías de iones de litio se pueden recargar más rápido que los tanques de diésel, lo que reduce el tiempo de inactividad y optimiza el flujo de trabajo.
4. Menores costos operativos
Aunque el costo de adquisición inicial de los montacargas de litio puede ser mayor que el de los montacargas diésel, pueden ofrecer ahorros de costos a largo plazo. Las baterías de iones de litio tienen una vida útil más prolongada en comparación con los motores de combustión interna, lo que reduce la necesidad de reemplazos frecuentes o de un mantenimiento importante. Además, la electricidad suele ser menos costosa que el combustible diésel, lo que conlleva a costos operativos más bajos con el tiempo.